Dos compañías del sector han presentado sus nuevas soluciones de biometría capaces de desbloquear un teléfono móvil con el iris, una tecnología más rápida y segura que la huella dactilar o la contraseña. Hace años, pocos usuarios se habrían imaginado que en un futuro podrían desbloquear su teléfono e incluso realizar todo tipo de pagos a través de una simple huella dactilar.

Sin embargo, otras dos compañías ya incluyen esta tecnología en algunos de sus dispositivos. El Touch ID, por ejemplo, permite realizar compras online colocando el dedo sobre el botón Home. Pues bien, otra solución biométrica acaba de llegar al Mobile World Congress (MWC), y ya les anticipamos que es más rápida y segura.

Entre las características más novedosas de este dispositivo destaca, sin lugar a dudas, su tecnología EyeVerify, que permite desbloquearlo tomando una imagen de nuestro iris.

Esta solución de vanguardia trabaja formando imágenes de los patrones venosos únicos en el ojo humano, y desde Teknautas hemos probado este tipo de reconocimiento con muy buenas sensaciones. La cámara registra rápidamente nuestro iris (más rápido que el Touch ID la huella dactilar), y es capaz de leerlo sin equivocarse a una velocidad sorprendente. Una de las ventajas del reconocimiento del iris en los teléfonos móviles es que agiliza todo tipo de tareas. El lector de huellas de muchos smartphones no siempre funciona a la primera (basta con tener los dedos húmedos para que no los lea), y también resulta más incómodo. Aunque no tanto como la tradicional contraseña, que además es la solución más insegura de todas.

Esta tecnología no sólo será capaz de permitir el acceso de forma cómoda a muchos teléfonos del futuro (aparecerá en los próximos dispositivos de la serie Grand), la compàñía ha anunciado que EyeVerify pronto se integrará con el pago móvil y otras aplicaciones como Facebook o Skype. Por lo que en un tiempo no muy lejano sus usuarios podrán realizar compras sin necesidad de introducir ninguna contraseña. Ni siquiera mediante la huella dactilar.

Otra compañía ha presentado también un prototipo de teléfono móvil capaz de leer el iris de cada usuario. La forma de utilizar esta tecnología es muy sencilla: tan sólo es necesario colocarnos delante de su cámara frontal para que tome una imagen de nuestros ojos. A partir de ese momento podremos desbloquear el terminal sin contraseñas ni huellas dactilares de por medio.

¿Más o menos seguro? Según Josep Albors, director de Comunicación y Laboratorio de Eset España, "claramente más seguro. La huella dactilar se deja en todos los lados. Se ha demostrado incluso que se puede hackear con una simple fotografía. El iris no es invulnerable, pero sí es más difícil".

En la misma línea se ha manifestado el analista de Kaspersky Daniel Creus, "en el iris hay más patrones a identificar que en la huella dactilar. Además, la huella dactilar se ha llegado a hackear sin llevar a cabo ataques sofisticados. Algo que no ha ocurrido con el iris". De lo que no cabe duda es que las técnicas de biometría avanzan a un ritmo vertiginoso.

En este MWC también se ha mostrado PalmSecure, una avanzada herramienta que detecta a los usuarios a través de la lectura de las venas de la palma de la mano. Prepárense porque en poco tiempo cambiará la manera que tenemos de entender el reconocimiento de las personas.

Ref. El Confidencial